Valentina Kryp: El cosplay me dio un destino

Desde la aparición de la primera estrella en la Grieta del Invocador con Lux, dando inicio a la narrativa de Star Guardians en League of Legends hace siete años, Valentina Kryp mantiene una conexión muy personal con las guerreras galácticas.

Dando vida a Janna en el evento inaugural, la argentina nacida en Buenos Aires, pero criada en el interior del país, llevó el liderazgo de Kai’Sa a este nuevo capítulo de la saga introducida en el MOBA de Riot Games, League of Legends: Wild Rift y Legends of Runeterra que terminó el pasado 15 de agosto.

En una conversación franca, la cosplayer y creadora de contenido, que reúne a más de 150 mil seguidores en sus redes sociales, hizo un recorrido cronológico de su propia carrera y contó cómo el arte dentro de la comunidad de videojuegos dio un giro en sus perspectivas profesionales.

¿Por qué empezaste en el arte del cosplay?

Bueno, empecé a acercarme más a todo lo que era esto, quizás, en 2013. Me enteré de todo lo que era el cosplay y dije: a ver qué es esto y por qué se están disfrazando de mis personajes favoritos. Siempre fui muy fan del anime, de los videojuegos y fui a profesionalizarme en 2016, que es cuando di el salto para comenzar a construir una comunidad con personas que apoyaban los proyectos que estaba haciendo.

¿Y cómo fue justamente este pasar de años para ti dentro de esta comunidad para lograr esta perfección que se requiere para estar lo más cerca posible a los personajes?

Todo lo que fue cosplay empezó a surgir como un fenómeno de representación por decir ‘amo este personaje, quiero convertirme y ser él un ratito por gusto’. Hay fandoms que se van creando, porque el cosplayer no es simplemente alguien que consume el juego, sino que lo vive. Se pasa directamente esta línea a una representación más artística. Yo empecé a crecer junto con las redes y con los eSports, fue como un crecimiento en conjunto que a mí me favoreció muchísimo.

Hablaste mucho sobre el apoyo de la comunidad, pero ¿cómo reaccionó tu familia con todo eso y con el trabajo al cual te dedicas ahora?

Bueno, yo siempre fui la distinta. Siempre tuve estos gustos más arraigados a todo lo que era el gaming y que, quizás, hace años atrás no era lo cool. Siempre me veían hacer el cosplay y decían ‘¿qué es todo esto?’ Pero yo siempre fui una persona bastante abierta y siempre les conté. Les explicaba la historia y de repente vieron que me empezó a ir bien y, hoy por hoy, son de las personas que más me apoyan. Si bien antes no han comprendido muy bien qué sucedía porque siempre fui la más pequeña de la familia y se encontraron con un mundillo que era algo nuevo, algo que estaba floreciendo en su época. De hecho, mis primitos hoy son mis fans y están como yendo a ver mis streams y mi cosplay. Tengo la fortuna de que la familia me apoye y esté viendo lo que uno hace.

¿Y cuándo empezaste ya sabías que esto era lo que querías seguir, o te fuiste por otros caminos? ¿Cuándo fue que el cosplay te marcó la diferencia? 

En su momento, había terminado el colegio muy chiquita porque justamente me adelanté algunos años y me encontré que no sabía muy bien qué hacer. En ese momento, ni el cosplay ni la creación de contenido eran considerados como una carrera, por así decirlo. Era un terreno muy inexplorado aún y yo estaba estudiando abogacía con 17 años en otra provincia, en Corrientes, y me pregunté si era realmente lo que quería para mi vida. Si bien tampoco planeo dedicarme toda mi vida a hacer cosplay, esto es por ahora algo que me hace muy feliz. La mentira fue que dije que iba a Buenos Aires y empecé a adentrarme de lleno porque me crie en el interior y no estaba presente para ver lo que sucedía. Entonces, me encontré con un mundo que estaba creciendo y del que quería ser parte. Es algo que me llena el alma. 

¿Cómo fue tu transición del interior a la capital a causa del cosplay?

Siento que, por lo menos acá en Argentina, todo lo que es el interior es un lugar bastante bastardeado. Siempre ha sido apartado de este tipo de fenómenos que van surgiendo. Siempre todo termina sucediendo en la capital del país, y yo siempre fui una fiel seguidora de todo lo que va surgiendo dentro del mundo gaming. Necesitaba información. 

Ahora hablando más sobre Star Guardian. Entre tantos personajes que tuviste a lo largo de tu carrera, ¿qué tan significativo fue ser parte de este evento? 

¡Wow! Fue muchísimo para mí porque, cómo te había comentado, en 2015 fue cuando surgió el primer skin de Star Guardian, de Lux, en tributo, quizás, a otra generación de las chicas mágicas y mucho tiempo después Riot decide sacar el conjunto de Guardianas Estelares me convocando en este momento para ser Janna. Era la primera producción comisionada por Riot Games a escala regional. Formar parte de la primera comunidad de todas a la última, y encima ser Kai’Sa que es la líder, realmente te plantea el paso de los años y lo tanto que uno evoluciona como artista. Siento que, en parte, me hace dar cuenta que finalmente uno está consolidado y es más seguro en sentido de poder dedicarme a esto. Me hace muy feliz ver este transcurso. 

Y mirando hacia atrás, ¿desde cuándo empezaste hasta esta consolidación de la carrera?, ¿qué significa ahora el cosplay para ti y para la comunidad latinoamericana?

Para mí es lo más grande que me ha sucedido a escala de artista. Definitivamente, el cosplay me cambió la vida, me dio justamente un destino. Me complementa y, de hecho, me hizo crecer muchísimo como persona. Es como que uno aprende a valorar el trabajo del otro, a agradecer la ayuda que recibes porque hay situaciones que uno tiene que luchar contra el tiempo o apurarse con un traje y una mano amiga siempre significa un montón. Las pequeñas cosas la vas valorando más y te vas dando cuenta que, por lo menos en lo que fue esta producción de Riot con un nivel cinematográfico directamente, sentirse acompañada en esto es algo que me hace pensar que realmente uno está parado donde debe estar.

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